El día 8 de diciembre se celebra la
festividad de la Inmaculada Concepción. Es una fiesta de carácter nacional cuyo
orígenes se remontan al año 1644. Con ese motivo visitamos la plaza que la
ciudad de León dedicó a la Inmaculada y que tiene en el centro una gran
escultura de la Virgen.
La plaza quedó
definida dentro de lo que se denominó el Ensanche de León, aprobado en 1904, y
que pretendía ampliar los límites de la ciudad hacia el oeste, hasta el río Bernesga
y la estación de ferrocarril creando nuevos espacios urbanos para construir
edificios y desarrollar actividades comerciales y de servicios. Se
encuentra entre dos plazas emblemáticas de la ciudad, la Plaza de Santo
Domingo, centro comercial y financiero y la Plaza de San Marcos,
con el espléndido edificio de Hostal de San Marcos. La comunicación entre las
tres plazas se realiza mediante la Gran Vía de San Marcos.
La Plaza de la
Inmaculada es una plaza circular comunicada con el resto de la ciudad con
ocho calles (Gran Vía de San Marcos,
Julio del Campo, Ramiro Valbuena, Santa Clara, Padre Arintero, Roma, Alcázar de
Toledo y Alférez Provisional). En el
centro existe una gran rotonda con un pequeño parque al que se accede por dos
pasos de cebra.
Preside la Plaza
una estatua de la Virgen que se erigió por iniciativa del Obispo de León Luis
Almancha, quien en 1953 creó una comisión para promocionar una suscripción
popular y levantar un monumento a la Inmaculada y así conmemorar el primer Año
Mariano de la historia, el de 1954. El escultor elegido fue el astorgano Marino
Amaya, quien confeccionó una imagen de la Inmaculada al estilo tradicional, vestida
con túnica, de píe, con las manos juntas en actitud orante. A sus píes unos
querubines. La imagen se colocó sobre una alta pilastra de base cuadrada
diseñada por el arquitecto Ramón Cañas. La inauguración del monumento tuvo
lugar el 3 de junio de 1956.

La Plaza de la
Inmaculada, antiguamente denominada de Calvo Sotelo, es el centro de la
actividad administrativa de la ciudad, en la plaza se encuentra el edificio de
la Subdelegación del Gobierno, junto a él, pero ya en la Gran Vía de San
Marcos, se halla la Delegación de la Agencia Tributaria, enfrente la Delegación
de Trabajo y a escasos metros las sedes de los sindicatos. Es una de las plazas
más animadas de la ciudad, sobre todo por las mañanas, con mucho tráfico y actividad.